Entrevista a Robert y Kristen

Robert Pattinson
Tal vez reconocemos su rostro por Harry Potter y el cáliz de fuego, pero pocos conocíamos el nombre de Robert Pattinson, y ahora, de repente, es todo un ídolo juvenil. ¿Cómo pudo este joven británico convertirse en toda una celebridad incluso antes de que alguien viera su película?

¿Qué se siente convertirse en una sensación de la noche a la mañana, a los 22 años?Es muy raro, porque soy un símbolo sexual para niñas de 14 años... y ésa no es la mejor situación del mundo. El año pasado ni siquiera podía conseguir una cita y ahora como que todas cambiaron de parecer al mismo tiempo. Eso fue de lo único que hablé el año pasado: “necesito una novia, necesito una novia”. En este momento podría tener a quien yo quiera, pero todas tienen 12 ó 14.

¿Y cómo sucedió esto?Si te soy honesto, estaba viviendo en Londres muy desilusionado de la actuación. Sólo estaba haciendo música y ya casi no pensaba en actuar, hasta que me habló mi representante en EUA y me dijo que tenía que hacer un casting. Crepúsculo fue uno de esos llamados de los que yo realmente no esperaba nada. Y cuando lo conseguí, no tenía la menor idea de lo grande que sería. Fue un golpe de suerte.

¿Recuerdas la primera vez que decidiste ser actor?Yo no llevé teatro en la escuela, pero cuando tenía 15 años recuerdo que fui a un club de drama específicamente porque ahí estaba una niña que me gustaba. Trabajé tras bambalinas, nunca tuve ninguna intención de actuar, y luego hicieron una producción de Guys and Dolls. De la nada me dieron muchas ganas de interpretar a Nathan Detroit, me obsesioné con eso. Pero no me dieron el papel... le hice de bailarín cubano. Luego hicieron Our Town de Thornton Wilder y yo era el único lo suficientemente alto para el papel principal. Cuando apenas comenzaba, yo quería ser como otros actores. Quería ser Jack Nicholson. Cuando tenía 16 vi Atrapado sin salida (1975) y comencé a vestirme como él. Quería interpretar esa papel en mi vida, no tenía nada que ver con actuar. Sólo me sentía incómodo siendo yo mismo, y adquirí diferentes manierismos de las películas... no me caía el veinte que eso era actuar. Luego empecé a ver muchas películas de Godard y me gustaba la libertad, comencé a ver las cosas que se podían lograr actuando, que podías tomar riesgos.

¿Te ha funcionado tomar riesgos?No siempre. Después de Harry Potter me dieron un papel en una obra llamada The Woman Before. En realidad no me gusta mucho el teatro moderno. Pensé que si hacía esto, lo haría con una interpretación que a mí me gustaría ver. Todos creían que estaba intentando imitar a Brando y me despidieron. Probablemente fue lo mejor que me pudo haber pasado. Lo que sucedió es que luego me dieron muchos trabajos porque dije que me habían despedido por defender mis creencias... cuando en realidad seguramente fue porque era malo.

¿Fue difícil darle vida a un personaje tan elusivo como un vampiro?Cuando leí el libro, parecía físicamente imposible hacer el papel porque básicamente es un enigma. Es un lienzo para que la gente le proyecte sus fantasías sobre el hombre perfecto y, obviamente, al ser un humano de verdad, no le vas a gustar a todos. En primera, tuve que abandonar esa idea de él como el hombre perfecto, así que lo empecé a ver desde el punto de vista de ella. Ella es la que está obsesionada con él, así que podía ser lo que nosotros quisiéramos. No sé si fue una salida fácil para no tener que conseguir el cuerpo perfecto, pero así empecé. Intenté quitar todos los elementos de su personalidad como vampiro y analizar de qué formas me identificaba con él.


¿Cómo ha cambiado tu vida toda esta atención?En Los Ángeles básicamente me la paso esperando a que suene el teléfono. Y leyendo guiones. En Londres, leo libros y veo muchas películas. Voy al bar. Debe sonar como que llevo una vida muy aburrida. –Ríe–. Aparte de que a cualquier lugar que voy hay niñitas gritándome...

Kristen Stewart
¿Qué tan suertuda puede ser una jovencita? De interpretar a la hija de Jodie Foster en La habitación del pánico (2002), a ser dirigida por Sean Penn en Camino salvaje (2007), a aparecer este año junto a Robert DeNiro en What Just Happened? (2008) y protagonizar una de las cintas para adolescentes más esperadas del año: Crepúsculo... Aún así, y al contrario de muchos de sus colegas, a Kristen Stewart, lograr tanto, tan pronto, no se le ha subido a la cabeza.

¿Qué se siente estar en este remolino de Crepúsculo, rodeada de fanáticos gritando en tu primera proyección en Roma?
Es interesante, porque he trabajado desde muy pequeña y frecuentemente con gente que me inspira y a quienes admiro mucho, y sé que suena exagerado, pero estoy hablando en serio. Es chistoso, porque muchas de mis películas casi ni se vieron, o por lo menos no recibieron la atención que se merecían. Así que tener algo que explote de esta forma, con tanta gente hablando de ella, está muy loco. Sólo me da gusto sentirme orgullosa de la película, del resto del reparto y de Catherine (Hardwicke, la directora)... supongo que es mucho más fácil pasar por todo esto cuando te gusta la cinta.

¿A qué crees que se deba que esta historia cautivó a toda una generación?
Las leyendas de vampiros tienen más de 3,000 años de antigüedad y existen en diferentes culturas que no tienen nada que ver entre sí. En todas hay mitos similares sobre gente que vive para siempre y que se alimentan de la sangre de otros, así que tal vez tengan sus raíces en algún tipo de realidad, quién sabe. Hay grupos muy grandes en todo el mundo que creen en eso. Pero el éxito del libro no es nada más por la parte de los vampiros, de hecho él es muy humano y bien podría estar luchando contra cualquier otra adversidad. Lo único, es que ésta es un poco más jugosa. Y levanta otras preguntas sobre la mortalidad y lo que significa vivir. La historia es extrañamente cautivadora, se siente como experimentar algo de primera mano. Como si sus vivencias fueran las tuyas, con esos detallados recuentos de una fijación que se convierte en obsesión. Creo que es un tema muy fundamental. Y nuestros vampiros son los protagonistas, no los villanos. Puedes ver lo que sería vivir como uno de ellos y es una existencia muy triste, muy difícil. Creo que otro de los aspectos atractivos de Edward, es que en la superficie es increíblemente ideológico, un vampiro perfecto, pero no lo es. En el fondo tiene muchos conflictos, está muy dolido y muy atormentado, y Bella le dice: “Yo no te odio. Soy la única que ve eso y te puedo salvar”.


Hay un momento en el que ella no parece tener miedo, al contrario de lo que sentiríamos los demás…
Hay algo natural e innegable entre los dos que literal e innegablemente no permite eso. Ella es muy inocente hacia todo este mundo de los vampiros, y sin embargo es la parte dura y segura de la relación. Es como si ella llevara los pantalones ente los dos, y considerando que sale con un vampiro, eso dice mucho –ríe–.

¿Alguna vez te ha gustado alguien obsesivamente?
Siento que siempre he sido un poca obsesiva. Así que sí, definitivamente. ¡Creo que empecé a enamorarme como a los cinco años!

¿Crees en las almas gemelas?
Creo que una de las cosas más hermosas es cuando dos personas pueden permanecer juntas, pero realmente no somos como pingüinos o patos que están juntos para siempre. Somos demasiado complicados. Creo que va más allá –ríe–. No sé, creo que no tengo idea.

Kristen Stewart está a punto de convertirse en un nombre muy conocido. ¿Te emociona? ¿Te da un poco de miedo?
No es tan épico como para Bella, no te cambia tanto la vida. Siento que estas cosas son muy intangibles. Espero que después de Crepúsculo sea más fácil para mí hacer las películas que quiero hacer. Pero no me emociona el perder mi anonimato. Realmente no soy muy buena con la gente, especialmente cuando desconocidos se me acercan. Pero se han abierto muchas puertas, ahora tengo la oportunidad de hacer cosas muy creativas y eso me emociona. Estoy en un momento muy bueno de mi vida.